Habitáculos lunáticos


Rosa García y Adrián Porcel, 2025. En proceso.

23 fotografías b/n, Hahnemühle Photo Rag 308 gr, medidas variables. Audio 1, 5 min, 1 seg. Audio 2, 4 min, 58 seg. Audio 3, 6 min, 2 seg. Audio 4, 5 min, 51 seg. Audio 5, 4 min, 43 seg. Audio 6, 6 min, 21 seg. Montículo de sal y texto.















Fotografías del proyecto.



Secuencia fotográfica.



Fotografías del proyecto.



Secuencia fotográfica.















Audios.


Habitáculos lunáticos es un proyecto sonoro que opera como un explorador terminológico desde el cual desentrañar los pliegues ocultos de la noción de «lunático», cuya raíz etimológica remite a ciertas condiciones mentales que, en épocas pasadas, se atribuían a la influencia de los ciclos lunares sobre el individuo. La propuesta reconfigura el término, otorgándole un nuevo sentido como gentilicio, con el fin de imaginar el satélite como un territorio imposible y, desde esa ficción, proyectar una distopía que pese a su lejanía física comparte el carácter voluble y asfixiante de nuestras desoxigenadas problemáticas contemporáneas. Asimismo, los materiales aquí reunidos constituyen un estudio especulativo sobre hipotéticas afecciones lunares que imposibilitarían la vida en el cuerpo satelital, funcionando como una analogía del presente: espejismos familiares pero extraños, reflejos todavía más deformados y enfermos de los convencionalismos que estructuran nuestra sociedad. Desde esa dislocación perceptiva, las piezas que integran la publicación configuran un escenario alucinatorio y sincronizado, que ensaya —mediante pareidolias— una voluntad de pertenencia a un lugar en perpetuo movimiento, regido por lógicas ignotas y espeluznantes. Las muestras de sonido que se han utilizado para la composición de los contenidos provienen íntegramente del archivo de dominio público BBC Sound Effects Archive. Dicha fuente, cuyas grabaciones fueron utilizadas en producciones radiofónicas de la emisora, aporta connotaciones de descentralización, reciclaje y adaptabilidad. Principios que nos invitan a reconsiderar nuevas formas de estar en el mundo, basadas en la interdependencia y la transformación mutua.

#1: El audio comienza con un ascenso orbital que transporta al oyente a un entorno remoto mediante una compleja red de señales espaciales. Las frecuencias captadas del exterior se combinan con emisiones del satélite Sputnik, ecos de radares lunares e interferencias de equipos radiofónicos, conformando un paisaje acústico que evoca la circulación por una base o enclave distante. El desarrollo sonoro que se produce está vinculado al tránsito desde un punto de ingreso hasta una salida estratosférica, donde la interrupción de la información genera una sensación de distanciamiento respecto a lo reconocible.

#2: En esta ocasión se levanta un horizonte sumergido sobre el cual se extiende una malla sonora de respiraciones. Las hiperventilaciones terminan por confundirse con el oleaje de un mar, estableciendo un juego de asfixia y bocanadas que modulan el ritmo respiratorio de un buceador. La atmósfera introduce la presencia de un contador Geiger, cuya alerta advierte sobre los peligros del entorno y exhorta al oyente a tomar distancia. Esta sospecha se confirma al final del audio, cuando una respiración artificial se aísla del conjunto previo, revelando a través del glitch la mutación resultante de la exposición a un sistema ajeno, regido por lógicas desconocidas.

#3: La composición recrea un espacio subterráneo donde los ecos se expanden de manera impredecible, desdibujando las referencias espaciales y generando un laberinto acústico de dimensiones indeterminadas. El derrumbe de la cueva da paso a una lluvia de fragmentos rocosos que enmascara el canto de focas, animales tradicionalmente vinculados a la figura mítica de la sirena. El archivo conduce al oyente más allá de los límites perceptivos de la cavidad, sugiriendo hacia el final del audio la reconstrucción de elementos que nunca fueron expuestos a la luz, descendientes de un cielo cubierto y de las galerías superiores de la topera.

#4: A partir de registros de erupciones volcánicas, se configura un paisaje sonoro que evoca el aterrizaje en un espacio ajeno. La combinación de interferencias de señal, alertas sintetizadas y texturas generadas por las emisiones volcánicas emula el crépito del fuselaje abrasado de una máquina. La superposición de dichos elementos evidencia el caer de un dispositivo que forcejea con una atmósfera desestimada e imposible.

#5: En esta pieza se establece un diálogo entre los sistemas de comunicación de insectos, como polillas y abejas, y los procesos mecánicos de computadoras obsoletas. El enjambre de organismos es intervenido por el conjunto de ordenadores, generando una interacción que configura una maraña sonora de obreras electromecánicas. A medida que el audio avanza, emerge una estructura lingüística adaptativa que crece exponencialmente en fluidez y sincronía. No obstante, los rudimentos de dicho sistema, aunque aparentemente coherentes, suscitan interrogantes sobre su verdadera naturaleza, oscilando entre lo orgánico y lo artificial.

#6: El material introduce una reflexión sobre la relación entre la luz y la presencia. La iluminación no sólo determina qué elementos captan la atención del observador, sino que también define y materializa su existencia. El cambio de estado drástico que aquello expuesto experimenta se insinúa a través de la condición también inestable de un público que lo celebra. Todo ocurre en el interior de una habitación, donde el enigma no radica en la naturaleza del cambio, sino en el momento en que este acontece, enfatizando así la relevancia de la temporalidad en la construcción de la experiencia.